Rayo increible

Cuando benjamín era joven sentía un enorme gusto por los caballos de carreras y se dedicaba a su crianza. En sus inicios en ese negocio, fue testigo del nacimiento de un potrillo al que bautizó como "Rayo Increíble".
Fue el primer caballo que entrenó desde pequeño. Conforme pasaba el tiempo, "rayo increíble" corría cada vez mejor, así que pronto comenzó a ganar todas las carreras en que participaba. En aquel momento, el caballo llegó a tener un valor de siete mil dólares.
Sintiéndose dueño de un ejemplar ganador, Benjamín comenzó a jugar y apostar grandes cantidades de dinero, pero llegó un momento en que perdió todo, incluyendo al caballo, pues lo vendió en sólo tres mil dólares con tal de salir de sus deudas.
Sin embrago, Benjamín no pudo resignarse a vivir sin su caballo y decidió recuperarlo a toda costa. Trabajó muy duro y logró comprarlo en diez mil dólares. Volvió a entrenarlo y en el siguiente concurso hípo nacional, volvió a ganar el primer lugar.
Desgraciadamente, hace poco, durante una sesión de entrenamiento, "rayo increíble" tuvo un accidente y se fracturó la pata delantera derecha.
Los veterinarios opinan que no queda más remedio que sacrificarlo, pero benjamín quiere escuchar otras opiniones, porque se siente incapazde resolver por sí solo estos dilemas:
  • ¿El caballo debe vivir o morir?
  • ¿Ha ganado o perdido este caballo?
  • ¿Benjamín ha ganado o perdido con este cabllo?